Carta 15 a
Jesús de Nazaret.
Domingo VIII del T-Ordinario (2- 3-
2014)
Evangelio: Mateo 6,24-34
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S
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eñor: La lectura del evangelio de hoy,
me ha sorprendido. O mejor: me desorientó. Es muy bonito lo de los pájaros y lo
de los lirios. Poético, pero poco realista.
¿Qué no me agobie pensando qué
voy a comer o qué voy a beber, o con qué me voy a vestir?
Vino a mi recuerdo la
situación de los millones de padres y de madres que no tienen qué dar a sus
hijos hambrientos. Oí los lamentos de los que mueren echados desnudos sobre
esteras, sin agua que refresque sus labios sedientos y febriles.
¡No entendía lo escrito!
Era verdad
que no entendía lo que estaba leyendo. Había dejado atrás, sin detenerme, lo
que era la clave de su entendimiento: “NO PODEIS SERVIR A DIOS Y AL DINERO”
Había
puesto mi atención en las consecuencias,
y olvidado las causas.
*Los
pájaros se alimentan y no siembran”. Pero tienen alas y, para ellos, son
suficientes.
*Los lirios no hilan, y
se visten majestuosa y bellamente.”. Porque tienen raíces.
Los pájaros se alimentan
sin necesidad de almacenar, porque otros sembraron y sus alas les permiten
desplazarse.
Los lirios se visten
porque tienen raíces y profundizan hasta dar con el jugo que otros regaron
Al final del escrito,
dabas, Jesús, la solución que ataca directamente la causa del mal que se ceba
en el hombre: la falta de amor.
Construir en la Tierra el
Reino de Dios, es la solución. La
justicia de ese Reino, garantiza a la Humanidad las añadiduras que satisfacen
las necesidades de los hombres.
Y más: Los
catapulta a una situación de paz y a una promesa de felicidad, que traspasa las
fronteras de aquí abajo..
Es
¡transformar la sociedad en una familia con un Padre que es Dios, y unos hermanos
unidos por el amor que dimana de ese Padre!
Una Tierra
donde se sembrará trigo para todos y
se
regarán todos los campos
y todas las parcelas.
Con afecto y adoración.
Bartolomé Menor.
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