1 DE FEBRERO, NOVENO
Y ÚLTIMO DÍA DE NOVENA
SALUDO INICIAL
V/.
En
el nombre del Padre + y del Hijo + y del Espíritu Santo.
R/. Amén.
V/.
Que
la paz del Señor esté con todo vosotros.
R/. Y
con tu espíritu.
ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS
Gracias te damos Padre, por la Virgen de la Paz, Madre de
tu Divino Hijo, Mujer dócil a tu Santo Espíritu.
Intercede por nosotros, pecadores, Madre de la Paz
bendita para que podamos conseguir la paz verdadera que procede sólo de tu Hijo
Jesucristo, Príncipe de la Paz.
Concédenos, Señor, por esta novena, espíritu de piedad,
reflexión profunda, conversión de vida, renovación de la fe, deseos de santidad
y un amor grande a Dios, a la Iglesia, y a los hermanos.
Junto a la Virgen
de la Paz, sea nuestra alabanza y gloria a Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
+
Virgen de la Paz, Hija de Dios Padre: Dios te salve María, llena eres de
gracia….y Gloria.
+
Virgen de la Paz, Madre de Dios Hijo: Dios te salve María, llena eres de
gracia….y Gloria.
+
Virgen de la Paz, Esposa de Dios Espíritu Santo: Dios te salve María, llena
eres de gracia…y Gloria.
REFLEXIÓN
LA VIRGEN MARÍA, IMAGEN DE LA IGLESIA
“Por su total
adhesión a la voluntad del Padre, a la obra redentora de su Hijo, a toda moción
del Espíritu Santo, la Virgen María es para la Iglesia el modelo de la fe y de
la caridad. Por eso es miembro muy eminente y del todo singular de la Iglesia,
incluso constituye la figura de la Iglesia.
La Madre de
Jesús, glorificada ya en los cielos en cuerpo y alma, es la imagen y comienzo
de la Iglesia que llegará su plenitud en el siglo futuro. También en este
mundo, has que llegue el día del Señor, brilla ante todo el Pueblo de Dios en
marcha, como señal de esperanza cierta y de consuelo. (CIC 967.972)
Virgen de la Paz, modelo de la Iglesia y de todo
creyente, concluimos esta novena con la firme certeza de que tú desde el cielo
intercedes por nosotros para conseguirnos los dones de la salvación eterna.
Prepáranos junto a tu Hijo Jesucristo una digna morada, no nos dejes caer en la
tentación y líbranos siempre del mal, oh Virgen Madre, gloriosa y bendita.
Amén.
(Reflexionamos unos minutos en
silencio)
Madre y Reina de la Paz, te encomiendo con todo fervor y
confianza la intención particular por la que ofrezco esta novena. Preséntala
ante Jesucristo tu Hijo, mi Señor y Salvador. Si conviene y es para mayor
gloria de Dios y bien nuestro que se cumpla y si no que sea la voluntad de Dios
Padre en la tierra como en el cielo. Amén.
(En silencio presentamos la
intención de la novena)
ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS
Virgen de la
Paz, Madre de amor, al asomarnos cada día al espejo limpísimo de tu vida, vemos
reflejadas todas las virtudes y gracias que Dios te ha concedido, llenando así
de paz nuestras vidas con tan hermosa luz.
Confiamos en tu
eficaz mediación, para mantenernos fieles en la fe, a pesar de nuestras
debilidades y pruebas, amando a Dios y al prójimo como Iglesia viva,
construyendo el Reino de Dios, Reino de Paz, como es voluntad de tu Hijo
Jesucristo nuestro Señor, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
GOZOS DE LA VIRGEN DE LA PAZ
Para
todos los días de novena:
Pues fuiste en
paz engendrada
Para nuestra
medianera,
Dadnos la paz
verdadera,
Virgen de la paz
sagrada.
Día noveno y último de
novena:
Muestra, en fin, continuamente
Que sois nuestra madre pía,
Y Baeza a porfía
Siempre os será reverente
Y para que eternamente
Así seas celebrada
Dadnos la paz verdadera
Virgen de la paz sagrada.
CONCLUSIÓN
V/.
Ave
María Purísima
R/. Sin
pecado concebida
No hay comentarios:
Publicar un comentario